Enviado por SPH DIGITAL el

Giovanna se siente confiada y capaz para aprender matemáticas. Ella cursa el 5º año de primaria en el estado de Guanajuato, México. Es una de las más de 8.500 estudiantes que han participado en programas de tutorías remotas implementados por los Ministerios de Educación de la región, universidades y sociedad civil con el apoyo técnico y financiero del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).  

Descarga aquí la publicación: “Multiplicar aprendizajes. Tutorías a distancia para potenciar la escuela“.

Durante 8 semanas recibió un mensaje de texto y una llamada de su tutora, Virginia, desde Veracruz (México). Gracias a este apoyo, estudiantes como Giovanna han logrado mejorar su desempeño en habilidades básicas de matemáticas un 30% más que otros estudiantes de características similares que también estaban asistiendo a la escuela regularmente pero no recibieron tutorías.  

La nueva publicación Multiplicar aprendizajes: tutorías a distancia para potenciar la escuela documenta la experiencia de estudiantes como Giovanna, describe la evidencia rigurosa sobre la costo-efectividad de estos programas en América Latina y el Caribe, y ofrece lecciones aprendidas para gobiernos y sociedad civil interesados en la implementación de este tipo de estrategias a gran escala. 

¿Por qué se deben aplicar las tutorías remotas en América Latina y el Caribe?

La mayoría de los estudiantes de América Latina y El Caribe no alcanza los conocimientos mínimos en matemáticas, lectura y ciencias. El 5 de diciembre de 2023, la OCDE dio a conocer las evaluaciones PISA 2022, en las que participaron 14 países de América Latina y el Caribe. Los resultados muestran una realidad preocupante: el rezago de aprendizajes de la región en su conjunto se estima en unos cinco años de escolaridad con respecto a la OCDE y en más de una década respecto al líder global (Singapur).  

En otras palabras, es como si el estudiante medio de 15 años en América Latina y el Caribe, que está por terminar la secundaria, supiese tantas matemáticas como el estudiante medio de cuarto de primaria en la OCDE, con 10 años de edad. Esta es quizás una caracterización extrema, pero es lo que sugieren los datos. Y es útil porque da una idea de la magnitud del reto y por lo tanto del sentido de urgencia con el que es necesario actuar.  

Los desafíos son particularmente agudos en matemáticas, pues tres de cada cuatro estudiantes tienen bajo desempeño, aunque los resultados en ciencias y lectura tampoco son positivos (la mitad no alcanza el nivel de desempeño básico). Para revertir esta crisis de aprendizajes tenemos que cambiar la mentalidad, asumir un compromiso colectivo con la mejora educativa y demostrarlo a diario, desde cómo les hablamos a nuestros hijos sobre la escuela, hasta las políticas y discursos cuánto y cómo invertir en educación pública.  

También te puede interesar: PISA 2022: ¿Cómo le fue a América Latina y el Caribe?

La pregunta natural es: ¿por dónde empezar? ¿Qué pueden hacer los gobiernos de la región para revertir esta situación de manera tal que América Latina y el Caribe se mueva en la dirección adecuada? 

Las tutorías remotas para promover la mejora de los aprendizajes rápidamente y a escala 

La implementación de programas de tutorías remotas a gran escala es un paso concreto para apoyar a quienes hoy están rezagados y disminuir las brechas que revela PISA 2022.   

Las tutorías remotas abordan las habilidades básicas o fundacionales, permitiendo a los estudiantes construir las bases sólidas que necesitan para seguir aprendiendo. Se enfocan en los más vulnerables ya sea por nivel socioeconómico, por zona geográfica o en base a sus resultados académicos.  

Las tutorías son un apoyo complementario a la escuela y pueden contribuir al cierre de brechas educativas. Los estudiantes que reciben tutorías remotas progresan un 30% más rápido que aquellos que no las reciben. Es decir, que si un estudiante sin tutorías puede dominar las operaciones básicas de matemáticas (suma, resta, multiplicación y división) en 9 meses, uno con tutorías las adquirirá en 6 meses.  

Por otro lado, existen indicios de que las tutorías también impactan positivamente en habilidades blandas relacionadas con la escuela. Según las encuestas de satisfacción de estudiantes y cuidadores, éstas mejoran la autoconfianza y los hábitos de estudio de los estudiantes, además de fomentar su bienestar socioemocional.  

La construcción de un vínculo entre el tutor y el estudiante influye positivamente en el bienestar emocional general de los alumnos, pues el contacto humano personalizado y constante mejora su motivación, confianza y autoestima. Se promueve también el involucramiento de las familias, ya que éstas acompañan activamente el proceso de tutoría.  

Cuatro aportes de las tutorías a solucionar la crisis de aprendizajes 

Los recientes reportes de la PISA 2022 desde la OCDE enfatizan la importancia de la resiliencia de los sistemas educativos y proponen 10 acciones puntuales para promoverla. Aquí destacamos cuatro características de los sistemas resilientes particularmente relevantes, que las tutorías remotas logran abordar de forma efectiva y económica, es decir, escalable:  

  1. Motivar el aprendizaje autónomo. Promover la autonomía de los estudiantes y su capacidad para motivarse ayuda a adquirir conocimientos y a aplicarlos en la vida diaria. Según PISA 2022, solo el 60% de estudiantes confiaba en sus habilidades para motivarse a sí mismos para hacer las tareas escolares. La tutoría brinda un espacio seguro para los estudiantes, donde se sienten apoyados por sus tutores, y les permite participar en una experiencia de éxito educativo. Esto fortalece su autoconfianza y propicia que crean más en su propia capacidad, no solo para aprender matemáticas, sino para aprender en general. 
  1. Reforzar el trabajo entre la escuela y la familia. Las familias implicadas, que se involucran activamente en la educación de sus hijos, pueden desencadenar un mejor rendimiento y bienestar de los estudiantes. Los alumnos con mejores resultados en PISA 2022 declaran que su familia suele comer junta en la comida principal, pasa tiempo hablando con ellos o les pregunta qué han hecho en el colegio. Durante la tutoría, los padres están al teléfono, participan en ese espacio, se interesan por el aprendizaje de sus hijos, y, quizás lo más importante, pueden apreciar en vivo y en directo esa experiencia de éxito para sus hijos. Además, los docentes reportan que sus alumnos con tutorías lo hacen mejor en la escuela también. 
  1. Apoyo adicional sí, repetición no. Los sistemas en los que menor cantidad de estudiantes repite un curso, tienden a tener mayores puntajes y mayor equidad. Repetir curso es caro, supone invertir un año adicional en cada estudiante y la evidencia sobre su efectividad es escasa o nula. Las tutorías permiten dar un apoyo complementario a la escuela, poniendo el foco en los más vulnerables. No todos los estudiantes de la región necesitan una tutoría personalizada uno a uno, muchos aprenden bien en la escuela, o en pequeños grupos, pero hay alumnos para los que este apoyo no es suficiente. Las tutorías a distancia democratizan el acceso a un recurso frecuentemente reservado para los estudiantes más favorecidos.  
  1. Tecnología al servicio del aprendizaje. Para ser efectiva, la tecnología debe integrarse al proceso educativo con un propósito claro. El uso de dispositivos puede ser una herramienta para enseñar, pero también puede distraer a los alumnos: así como los estudiantes que usan dispositivos en clase para aprender alcanzan, en promedio, 14 puntos más en matemáticas; también el 65% de los estudiantes en la OCDE reporta distraerse con dispositivos en alguna clase. Las tutorías a distancia son una solución de base tecnológica, pero se centran en apalancar tecnologías de bajo costo, enfatizan el establecimiento de conexiones humanas significativas y el propósito pedagógico por encima de la sofisticación tecnológica por sí misma.  

¿Cuánto se necesita invertir para expandir las tutorías a distancia en la región? 

El BID viene apoyando el desarrollo de programas de tutorías a distancia contextualizados en 10 países de la región, trabajando de la mano con los Ministerios de Educación y en asociación con organizaciones de la sociedad civil locales (CEES, CEPE-Di Tella, Corpoeducación, Dequení, Grade, Grupo Faro, MIA-CIESAS y World Vision). Hasta el momento, esta iniciativa ha alcanzado a más de 8.500 estudiantes, formando a más de 1.000 tutores, y contabilizando más de 45.000 tutorías efectivas. Los resultados de las evaluaciones han sido positivos y consistentes con los encontrados con intervenciones semejantes en otros países del mundo. 

Ofrecer tutorías remotas a todos los estudiantes con rezago educativo en una etapa clave en la que se suelen quebrar las trayectorias educativas, es decir en la transición entre primaria y secundaria, representa entre 0,02% y 0,6% del gasto educativo total de los países de la región dependiendo del país y la modalidad de implementación elegida.   

Además, se trata de una estrategia altamente costo-efectiva. Por cada US$100 invertidos en tutorías de ocho sesiones durante dos meses se logra el 40% del aprendizaje de un año escolar en habilidades fundacionales como la lectoescritura o las matemáticas. 

El desafío es pasar de los resultados probados a la implementación a gran escala. Para ello es fundamental cuidar el ABC de escalamiento efectivo:  

  • Acelerar los aprendizajes 
  • Buscar equilibrar los costos y la efectividad  
  • Cuidar la calidad en la implementación. 

América Latina y el Caribe necesita más niñas como Giovanna. Si bien las tutorías remotas no son la única solución que permita remediar todos los desafíos de la educación, sí tienen el potencial de convertirse en un primer paso para avanzar en una meta crucial: cerrar la brecha en aprendizajes fundacionales. Te invitamos a conocer más sobre las tutorías remotas para acelerar aprendizajes y cómo éstas pueden ser una solución para cerrar brechas de aprendizajes en la región. ¡No te lo pierdas!  

The post ¿Cómo reducir el rezago de aprendizajes con tutorías?  appeared first on Enfoque Educación.

Imagen
¿Cómo reducir el rezago de aprendizajes con tutorías? 
Division
Language content
Spanish