Modernización de las instituciones que administran beneficios de seguridad social, potenciando la formalización de empresas y trabajadores, simplificando trámites, mejorando servicios a aportantes y beneficiarios, y fortaleciendo su capacidad de adaptarse a los cambios demográficos.

Implementación de nuevas tecnologías en los servicios públicos de empleo para mejorar el emparejamiento entre empresas y trabajadores y para promover un uso más eficiente de recursos en la detección del tipo de trabajos que se están generando y las habilidades demandadas.

Apoyo a los países para asegurar que la fuerza laboral presente y futura tiene las habilidades necesarias para aprender a lo largo de la vida, acceder a empleos de calidad y progresar en el mercado laboral.

Implementación de mejoras en la cobertura y eficiencia de los procesos de inspectoría laboral y generación de incentivos a la formalización de empleos.